En estos caminos gastados de andar,
me paro a mirar mi alrededor y
a detener el tiempo entre mis
manos.
Miro caer doradas hojas de
matinal mañana, con un frescor
que cala en mis huesos ,
y deja caer sobre mis ojos un
sol tempranero de rojizo nacer.
Me siento en un tronco
que pesado por su edad a sido
derribado en los suelos , a seguir
mirando los arboles llorar.
Donde los sueños se paran
en la realidad,donde el tiempo
es solo una palabra al pasar
No estoy triste soy un hombre
libre y solitario,mirando las
hojas volar ,que van
rozando los vientos, en un eterno
otoño fugaz