Voltereta
No hay nada que duela más que ser inmune al amor, el sentimiento del corazón inerte, somete las entrañas de su portador a un doble juego, el del querer y al mismo tiempo no poder.
La soledad del piano callado, es como el dolor del poeta condenado a silenciar sus sentimientos. El sufrimiento de la propia soledad, acaba por reventar las visceras del que siente el arte, como un sentimiento de expresión de amor.
Un poema muy expresivo, a la par que bien hilvanado.
Un saludo.
01/05/12 05:05