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Los Manríquez

Cómo podía yo imaginar que aquel día de buena mañana
en el que salí ufano a trabajar, por ser entre semana,
regresaría a casa, once horas después, de oro y grana,
sin recordar como atravesé con mi bicicleta las vías urbanas.
Todo empezó cuando visité a un cliente al ejercer mi profesión.
En un local de esos que ahora llaman de restauración
me requerían para, como perito, desempeñar mi misión
y una vez acabados los trabajos, firmar su conclusión.
Como en mi tierra ya viene siendo tradición sana,
al terminar una obra y antes de abrir al público la persiana,
el dueño invita a un ágape tirando la casa por la ventana.
A una cerveza siguieron otras, porque es costumbre muy hispana.
Después, de vino y tapas me puse hasta llegar al nirvana;
luego, de Wisquis, morao como cardenales de la curia vaticana
Total, que entre una cosas y otras cogí una borrachera soberana.
No sé cómo pude pedalear, pues no estaba para filigranas,
pero al llegar a casa me encuentro a mi mujer en plan germana,
sí, de esas de la “Gestapo” o las “SS” que parecen otomanas.
¡Qué interrogatorio!Yo, gacelilla y ella, leona de la sabana.
¿Dónde has estado? ¿Con quién? ¿No te habrás ido de fulanas?
Fen lof Magrifquez, eg lon mangrinez; nada, no daba en la diana
Mientras, ella, con un flexo me alumbraba y me atizaba lana.
Como pude le dije- cariño apiádate de mí y tráeme una palangana
que no vengo de fulanas, ni menganas, ni zutanas, ni marranas;
sólo te quiero a ti, porque eres mi sultana, carita de porcelana.
Se ve que con estas palabras, que se me antojaron bequerianas,
se ablandó, se compadeció de mí y me hizo una tisana.
Después cariñosa me acunó suave y me cantó una nana.
No vuelvo a beber hasta que se me olvide, prefiero una almorrana
Lumino13 de agosto de 2014

8 Comentarios

  • Lumino

    Os presento esta historia real acontecida a un amigo muy próximo. Seguro que sonreís
    Gracias por venir

    13/08/14 09:08

  • Vanished

    sea lo que séa me he reido mucho, cuando no atinaba al nombre he inundado el barrio con grande carcajada, eso bien que has escrito. Saludos :)

    13/08/14 09:08

  • Libelula

    Jajaja Si esque es mejor para beber el agua bendita Jajajajaja.
    Un abrazo

    14/08/14 08:08

  • Voltereta

    Es malo beber, sobre todo cuando uno se bebe hasta el agua de los floreros. En la tramontana de la melopea, los recuerdos permanecen turbios en la memoria y eso cuando aparecen.

    Hay quien bebe para olvidar y hay quien se sumerge en el olvido cuando bebe, sin querer.

    Simpático personaje el protagonista y una buena rima para adornar todavía más el cotarro.

    Deberías escribir el poemario, del "libro del buen humor".

    Un saludo amigo.

    14/08/14 07:08

  • Lumino

    Gracias Vanished, bienvenido. Me alegra que te hayas reído.

    Gracias por venir, Ana, espero que estés pasando un lindo verano.

    Voltereta
    Podría escribir en el, pero sería una antología de muchos autores. Aunque el humor ocupa muy poca parcela aquí. Seguro que si lo proponemos nos sorprendemos con la respuesta.
    El peligro del humor está en lo grotesco. Patinar por una fina línea y mantenerse en ella.
    Salvando distancias logarítmicas un "estandard" de equilibrio sobre la fina línea es aquello de "Una vieja y un viejo van pa Albacete"
    Perdona por la broma; además nunca he estado en Albacete.
    Gracias por venir.
    Salvador

    14/08/14 08:08

  • Indigo

    jajaja, buena esa veta humorística, por cierto, muy escasa por estos lares.

    Saludos.

    23/08/14 10:08

  • Blues

    Ingeniosa y divertida! Felicitaciones :)

    19/09/14 05:09

  • Blues

    Ingeniosa y divertida! Felicitaciones :)

    19/09/14 05:09

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