Que no se cumplan los designios
que no me busque la noche
Quiero encontrarte al alba
para que seas siempre mi hombre.
Que no se oscurezcan las lunas
que no me engañen las estrellas
Te busco en el claro de la mañana
rehuyendo caer, en el arrullo que a mi oido araña.
Que no rompan las olas al poniente
que no se distraigan las gaviotas
que cerca ya se presenta
el combate de nuestras almas.
Marinera:
"Te busco en el claro de la mañana
rehuyendo caer, en el arrullo que a mi oido araña".
"el combate de nuestras almas".
Amiga, esos amantes se daran alguna tregua.
Saludos.
Serge.