Sentí tu dolor
tan adentro mío
Filoso y quemante, amor
Se abrió el cielo
Y el amanecer nos desvistió de llantos.
No hay lunas en este universo
Ni estrellas ni un maldito planeta.
Solo este dolor. .. Siento el vientre revuelto
las manos frías. Aún tengo el húmedo beso
y tu gemir ahogado en mi cuello.
Por qué tanta furia
el grito agónico
penetró angustias, vomitó la idiota culpa
el remordimiento inútil, para qué
si nada cambia afuera de estas cuatro paredes.
Si todo sigue igual. Acaso la conciencia
de una historia sin placer.
Qué me importa lo que pasa afuera
Si la copa está al borde y no has bebido
y estás muerto de sed
por qué reclamas amor
si te niegas al goce del fruto prohibido.
Mi cuerpo no es asilo ni ánfora ni el cáliz
de tu agónico espasmo.
Despréndete de mi, busca en otro lado
lo que no puedo darte.
Llévate tus dudas, tu vanidad
Tu corto amor, tu universo desnudo.
Llévate tu sudor, tu sexo atormentado
Tu orgasmo apresurado.
El beso de un despertar sin el sol en la ventana.
Sin habernos dormido, sin saber cómo amarnos.
No es la culpa quien se roba tus miedos de mi cama.
Es tu debilidad
Y este dolor que penetra y me desvasta.
Quiero leer mas de ti.