TusTextos

Vacio

Se incorpora de su lecho, siente la humedad del piso al tocarlo con sus pies desnudos.
Va hacia otra habitación donde orina y se echa agua sobre el rostro barbudo,
carraspea y se pasa ambas manos por la cabeza a modo de peinado.
Nuevamente descalzo camina hasta la silla donde su pantalón y su camisa lo esperan.
Nada de desodorante para axilas.
Nada de talco para pies.
Sus zapatos aguardan su turno bajo la cama perfectamente yuxtapuestos.
Enciende la hornalla y calienta agua en una pava algo abollada.
En un jarro coloca un saquito de infusión, se sienta a esperar mirando el techo de chapa, las telarañas, los vértices que conforman las paredes.
El ruido del agua hirviendo los saca de sus estériles cavilaciones.
Vierte el agua humeante dentro del jarro, el agua va oscureciendo dentro del recipiente.
Nada de azúcar.
Sopla el humo y bebe un ínfimo sorbo.
Escucha el alboroto de los parranderos llegando a sus ranchos con la mente en blanco.
Deben ser las 7 del sábado.
Debe apurarse a partir si no quiere llegar tarde.
Debe pedalear duro hasta el centro.
Para no encontrar vacíos los contenedores de basura.
Vacíos e inútiles, como sus pensamientos suicidas.
Como su maldito transcurrir.
Matias01 de noviembre de 2012

Más de Matias

Chat