Tengo que Quererme...
+ ¿Por qué lloras?
- No quiero perderle…
+ ¿A quién no quieres perder?
- A mi mejor amigo… Después de tanto empiezo a pensar que esta así porque es su forma de actuar, porque necesita enfadarse con alguien para ver si realmente le quieren. Y decide picarse conmigo porque sabe que le perdono siempre. Pero me empiezo a cansar de todo esto, estoy muy harta, pero no puedo mandarle a la mierda porque le necesito.
+ ¿Sabes? No sabe lo imbécil que es. Cuando se quiera dar cuenta de esto será demasiado tarde y habrá perdido a la mejor amiga que pueda encontrar.
- Gracias por ayudarme, de verdad…
+ Sé que no viene a cuento pero a veces me pregunto cuánto cariño me tienes a mí…
- ¿Sinceramente? No lo sé, no sé cuánto puedo llegar a querer a una persona que no conozco…
+ Pero yo…
- No, tú nada. En esta amistad o como quiera que se llame no hay argumentos, tan solo palabras, no hay hechos, solo hay un millón de frases dichas por tuenti y por teléfono, un millón de frases que no nos llevan a ningún lado. No conozco lo que te gusta, lo que te disgusta, tus aficiones, tus experiencias, nada… Solo sé tu nombre, tu edad, dónde vives y que has estado tonteando conmigo… nada más.
+ Me gustas tú…
- ¿Sabes? Yo necesito que me quieran de verdad… sino no estoy agusto… Yo no soy de ir por ahí con líos de una noche porque sé que luego acabo yo mal y no quiero…
(Un largo silencio…)
+ Veras, no sé qué decir… no entiendo muy bien lo que me quieres decir… deja que me lo piense y te digo.
- Bien, con el silencio me lo has dejado todo claro… Yo solo quiero que sepas que no me voy a quedar de brazos cruzados, porque la vida no se va a parar solo porque tú pienses, la vida sigue… y mientras tú piensas yo voy a disfrutar y a reírme, porque puede que a lo mejor mañana ya hayas entendido lo que quiero decir y se pueda intentar algo, pero también puede ser que tardes en entenderlo o que no lo entiendas nunca, y mientras tú no lo entiendas, habrá otro que si lo haga y que sí sepa darme lo que necesito sin pensárselo… Habrá alguien que me quiera de verdad, con mis virtudes, pero también con mis defectos, y en ese momento, querrás haberme entendido y haberme valorado desde el principio…
