A tu lado he recorrido
el más dulce de los ríos,
el que lleva en lo profundo
la savia de este mundo.

Tu savia, mi querido amigo,
esa que duerme conmigo,
es mi interminable tormento,
es a la vez lujuria y alimento.

Lujuria porque aún despierta
sueño con que abras la puerta
de todos mis cuartos vacíos
y los colmes con nuevos bríos,

que no dejes paz en este cuerpo,
que de palabras ya está cubierto,
más que de placeres y sudores
da sus últimos estertores.

Cuál alma sedienta todo bebí
y tomé hasta lo que no debí,
aunque de nada me arrepiento,
mi piel sabe que no miento.

Aunque mi mente no lo note
y la distancia nos azote,
amigo, a tu encuentro voy,
hazme tuya de nuevo hoy.

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5 Comentarios

• 

  Avelibre

  Minerva,
  
  un placer conocer tus letras. Lograr un poema erótico sin rebasar la línea de lo sutil, es, a mi modod de ver, uno de los desafíos más complejos.
  
  Si me permites, quisiera destacar los versos que más me han gustado:
  
  ...Tu savia, mi querido amigo,
  esa que duerme conmigo,
  es mi interminable tormento,
  es a la vez lujuria y alimento...
  
  Muy bonito,
  
  Caro
  

  20/09/15 03:09

• 

  Minerva2015

  Gracias Caro! Eres muy amable.

  20/09/15 03:09

• 

  Voltereta

  Un poema lascivo y lujurioso, a la vez que elegante, no es fácil hacer que coincidan los dos mundos y tú lo has hecho muy bien.
  
  Un saludo.

  21/09/15 10:09

• 

  Minerva2015

  Gracias Volte. Un saludo cordial

  02/10/15 11:10

• 

  Danae

  Has plasmado pasión con la contención precisa para que no se te descontrolara la lírica de tu texto.
  Encantada de leerte.
  Un abrazo

  18/10/15 10:10