Cuesta vivir, cuando lo que amamos
se llena de cenizas que se lleva el viento,
esas que me transportan al ayer,
a lo incierto,
cuando no me espera nadie,
a la hora del regreso...
una cama desierta, vestida de silencio,
sin Dios a mi lado, apostando al infinito
cuando la esperanza se tiñe
de colores muertos,
cuesta vivir, con los ojos viejos,
cuando mi ego, de los que soy
está preparado para ser uno solo
cuando la creación, no ejercita el cielo,
ser felíz complica, aturde, mortifica,
cuesta vivir, con las alas cortadas
si el recuerdo engaña lo que pasó
cuando en la mente reina un desierto
de arenas incendiadas,
fuego lento,
camino descalza..., hasta el final...,
hacia lo eterno...
cuesta vivir, cuando vivir es incierto
cuando no escucho el eco
de mi propia voz
cuando no veo mi sombra,
reflejada en el suelo,
cuesta vivir sin caricias,
con alma desmayada,
atónito dolor...