La Frutilla de mi EngaÑo
Espíritus lumínicos acariciando alas...
no son las mías...
voces agitando silencios mudos
un universo blanco antiguo, impalpable al tacto
acaso seré la frutilla del propio engaño?
acaso habré muerto por qué tu te has ido?
atropellaré a mis verbos para no conjugarme
cruel presagio del infierno atroz, aterrador,
hoy concretado,
asesino camuflado en mi cotidiano pasar
de sin sabores encontrados...
olor a sangre fresca en el aire,
este aire que ya no aspiro
recíduo de metal oxidado en mis pupilas
llorando lágrimas de acero, azoradas y frías
ya mi imágen no se refleja en los espejos... donde he ido?
aquí estoy... sola
sin tí...
en éste crudo invierno sin baldosas que salpiquen
la penumbra de mi propia soledad...