Llegaría a ser divertido si una ligera mezcla de vanidad, de supuesto engreimiento, de una más que evidente e insustancial posibilidad de dar crédito a quien no existe. Es usted una paradoja: no existo luego no escribo y no expreso, luego de quien se supone no es de (mi/nadie) sino de su...NADA.
El lenguaje escrito como cualquier actividad del pensamiento, está asociado posteriormente a la crítica o análisis y sus muy variados matices, bienvenida sea. Diferentes matices lo establecen los lectores que de acuerdo al grado de conocimiento, capacidad, la ejercen (la crítica).
El que manifiesta aprobación o reprobación por determinado escrito tiene oportunidad de presentar en forma didáctica en que se basa su asertividad en ambos casos.
En mi apreciación personal, una persona versada en lingüística o gramática pudiera ser en cuanto a crítica, directo, no complaciente, franco; deseoso de que se cumpla aquello de el alumno superando al maestro, sin omitir honrarnos con sus conocimientos al editar contenido esmerado, permitiéndonos leer lo que comunican sus propios escritos, es decir, demostrar con habilidad, ingenio y sustancia al lector o escribiente novel, dando oportunidad de que el autor del texto criticado, se pueda nutrir o manifieste su parecer, comentando.
Luego de 3 años, comprendo que en esta web se combinan factores afectivos y literatura diversa y por ende la crítica ha de ser mesurada para que la respuesta no entre en el campo de la pasividad o la agresividad.
Oh no, supongamos que ¡me descubrieron!