Hoy me he levantado con ganas de perder. No sé si la culpa es tuya o si son las ganas de brindarle al casino un amigo nuevo. Tal vez sea la oportunidad de mi vida o la ocasión perfecta para tener un entierro barato. ¿A caso importa? Tus defectos seguirán marcando tu persona, igual el tahúr de segunda marca la baraja. En fin, me he levantado y me apetece celebrarlo, disfruta de que aun respiras, yo pagaré esta ronda, con la condición de que disfrutes de lo que eres, no de quién eres. Recréate en los pequeños detalles que marcan el ambiente, fíjate en como la luz del sol se refleja en los cristales de los coches, aprecia el esfuerzo de los pájaros en pleno vuelo, libres. Aprécialo tú por mí, yo estoy demasiado ocupado esperando el toque de ruleta que deje caer la bola en mi treinta y tres negro. Creo que ya es de noche, sí, debe serlo porque ese era mi último billete y esta ha sido mi última jugada.
