Y esque se me ocurren tantas cosas posibles,
indiscretamente amables.
¿ Y si no es ella quien saca lo peor de ti?
Complicidad en la mirada, se entiende,
vuelves a ser tu.
Algo indestructible se creó, allí,
en aquellos humildes atardeceres
aspirantes de lo efimero.
Dejame demostrarte que por las calles
todavia existen bailes nunca antes vistos,
alegres al compas de los suspiros
pues, todo esta aún por descubrir y conocer.
Bares en los que dejamos la cordura aparcada.
Brindis que por olvidos alzamos la mirada.
Frias madrugadas ardientes del Norte,
altos hornos con llamas de esperanza.
Yo vigilo,
tu aceleras
yo cruzo,
tu te vas.
Y amenudo me quedo temiendo
si habra una delicada llamada diciendo que ya no estas,
Si realmente nos dió tiempo el tiempo de quemar las calles
y hablar.
