Desgarrando la vida
con siniestro fracaso
sabiendo, que pasa el tiempo
y el amor nunca a llegado
hacer una ùtopìa de las cosas,
para poder seguir viviendo
las ganas la salud , se van
perdiendo.
La piel cansada se va
desquebrajando y la sonrisa
es cada ves màs lejana.
quedarte con las ganas
de haber podido dar màs de lo
has dado
amar mucho màs de lo que
has amado.
sentir que la piel se derrite,
de tanto amor que te ha
sobrado.
poder gritar su nombre tantas
veces que la garganta se quede
sin voz y sin aire.
Morir y llevarte, tantas ganas
que se hacen parte de la vida
y quedan deambulando en
algùn balcon o en una ventana.
Norma, en principio, lo que me ha llamado la atención de tu texto ha sido el título.
Luego, leyéndolo, debo decirte que es muy emotivo ver cómo habla de un amor que no ha llegado, pero la queja que leo en realidad no es esa. La queja no es no recibir más amor, sino no poder dar más amor.
Un sentimiento que enaltece el poema.
Un gusto leerlo.
Gran abrazo.