Ella era la experta de los labios imposibles.
De las madrugadas desiertas.
De los amores sin nombre.
Ella era la experta en arrancarle la ropa a muchos con la misma rapidez
con la que ellos se volvían a vestir antes de amanecer.
Ella era la experta en echar leña al fuego cuando ya era verano.
Ella era la experta en muchas cosas,
pero sobretodo, la experta en la soledad.
Me encanta Olivia, me fascina tu forma de componer un texto, tienes una fuente inagotable de inspiración, un placer leerte, un beso