Chispeaban incesantes y tormentosos los pensamientos,
Y calaban
Tan duros y profundos que horadaban la sesera
Formando cóncavas lagunas
Haciendo crecer las malas hierbas.
Es lo que tienen las tormentas pero tras la tempestad ineludiblemente llegará la calma.
un saludo.
Bueno, tremendamente certero.
Saludos cordiales.