Me vi involucrado en una situación en la que me iba la vida. El posterior de mi torso apoyado en una pared fría con el incómodo pinchazo de un arma de doble filo coqueteando con mis entrañas. La frialdad con la que tomaba asunto tan serio, me asustaba aún más. Todavía no sé si realmente era la fuerza de la química de mi organismo o es que verdaderamente estaba disfrutando de una escena de una obra de arte dramático en vivo. Parecía que todo estaba en su sitio, calculado al milímetro y ni tan siquiera la imperceptible presencia del caos podía meter mano en el asunto. Las miradas eran banales, carecían de significado; cada uno cumplía con su rol, atacante y atacado. Era insultante pensar que con un mínimo esfuerzo millones de momentos se desvanecieran y pasaran a no formar parte de nada. Todo aquello que mis sentidos habían disfrutado dependían de un pedazo de material inerte. Aquel humano dejó de serlo y pasó a ser una mera silueta en el horizonte de una panorámica. Deseaba dar mil volteretas, quinientos saltos, cien pasos y ponerme de rodillas. Pero en uno de esas mil volteretas caería al agua y me quedaría allí, en uno de los quinientos saltos me aferraría a una nube y me quedaría allí, en uno de los cien pasos llegaría al fin del mundo y me quedaría allí y quedándome de rodillas me traicionaría.
La estrategia empezaba a desaparecer acompañada de la calma que parecía que tenía prisa por llegar a algún lado. La agonía saludaba de lejos dejándose ver como si tuviera algo que decirme. En la otra esquina, la derrota cumplía con sus quehaceres rutinarios. Aquella presión en mi cuerpo se hacía cada vez más consciente y ni la sustancia más activa podía camuflarla. Cuando la historia parecía que llegaba a su fin, en una imperiosa necesidad de dejar un mensaje grité:-¡ Aaahhh!- Y te despertaste diciéndome: -Cariño ¿Qué te pasa?- Contesté: -Nada! Que me estabas clavando el codo en la barriga.-
La verdad es que no es ningún sueño que me haya acontecido, pero sí, realmente contiene un significado muy grande. La misma fuerza que te está dando la vida es la que te la está quitando. Saludos ;)
