CENIZA MORTIS, VUELA CON EL VIENTO.
Este deletéreo despojo, que peregrina la vida,
camina hacia el horror de la muerte,
destrozándose está las uñas ungiéndolas en la vida
prosecuciones enlaza más la ingenuidad le engaña,
pues las uñas no son bastante para quedarse,
lo sutil no fue bastante y nunca suficiente.
Las cenizas salen de la chimenea,
triunfante el viento me disipa,
nada soy ya, sólo otra hazaña del viento;
ceniza mortis con la risa del céfiro se va,
da terror su saña, su impasividad,
ante los ojos acuosos que lo observan,
sabiendo todos que algún día serán protagonistas,
y quien contempla el orbe, sabrá a su real semblante.
Adonde anteriormente el orgullo, dictaba leyes,
donde la vida manifiesta florecía,
en la paz y en la guerra presidía,
se prenden hoy los viles animales.
¿Qué queréis usurpar, ¡oh mortales!, ¡oh hombres!;
si en los desaires de la expiración helada
usuales yacéis con los restantes mortales?
Una existencia no equivale a nada,
el viento de la pira siempre vence,
el calor calienta la madera junto al alma,
la ceniza mortis siempre vuela con el viento,
sin dejar nada de nosotros,
nada[...]