A Charo:







Días que no volverán






En los días de los enunciados
Cuando los dictados son corregidos
La fecha de la cuadrícula
No tiene un destino, ni significado.


Alborada,es la hora del sol al amanecer, pero este no nace
Es la luna la hora del ocaso, más siempre para ella, es de noche
Hay una niña apartada, mientras todas saltan a la comba
Ya no hay sitio en la hora su recreo.


En la mañana de todos los días absurdos
La vida se conduce como el río
Inexorable a las bahías de los sentimientos perdidos
Sin que la tenaz luminosidad, obligue a abrir sus ojos.


Días que no volverán, días que el poeta llorará
Las respuestas se hacen inerves a las preguntas
Y los niños del coro solo atraen a las golondrinas
Para fabricar una nueva corona de espinas con que acabar el día.


Sola ante la existencia, arrastra el madero
Desde aquel instante que la pena crucificó su existencia
Presente en la encrucijada de la vida, la observa pasar
Ve su cuerpo en el vacío, en la oscuridad, y solo el sollozo, viva le hace estar .


En la mañana de todos los aniversarios
No habrá recompensa al volver el momento
Velas sin apagar, y un vacío nuevo que llenar en el alma
Solo como regalo, un cerrar los ojos intentando no olvidarlo.


En el temblor de nuestras ignorancias
Creeremos que el mar de sus sentimientos se secará
Pero el olvido de su anterior estado, abrasará sus mejillas
Antes que la memoria deje de hacerle llorar por su recuerdo.


Y abrazado a él
Bailará todas las noches
Intentando sentir su manos en sus caderas, como en aquel baile
Y susurrando le dirá, un te quiero de mujer enamorada.


Un te quiero, un te amo, vida mía, de mujer enamorada.

PolarisSeguir Autor Recomendar Texto Agregar a Favoritos