Y me pierdo en los silencios, en la soledad de la noche, me diluyo en el frío de la indeferencia sin explicarme porqué, una y otra vez me diluyo en el rincón en que la vida parece querer encerrarme.

Una vez más me levanto después de los golpes pensando en el motivo ya que jamás he atacado y siempre he ayudado, pero para que te aparten no hay razones ni excusas, solo te usan y te dejan a un lado, una vez más te ves rechazado.

A veces se pierde la esperanza de soñar con algo mejor, y crees que solo estas avocado a los caprichos de ese destino que terminas por odiar, otras ves un rayo de luz pero cuando pasa el tiempo y es un espejismo, el daño es aun mayor.

Por eso ante mi tengo la decisión de seguir soñando y vivir con ilusión, o aceptar lo que llaman la realidad y vivir con melancolía, pero tal vez sin decepción, aceptando ese rincón y no mostrando a los demás ese lado especial, que a nadie parece importar menos a mi.

Y me pierdo en el olvido de quien no supo valorarme, de quien no aprecia mi compañía o rechaza mi pasión, y soy consciente del tópico "hay que quererse a uno mismo y dan igual los demás" pero cuando una y otra vez encuentras el desierto del desprecio, la oscuridad se acerca certera, y me pierdo en el viento sin saber si alguna vez sentiré eso que llaman el verdadero amor, me pierdo en un mar de dudas porque si eres solamente tú quien confías en ti mismo, no sabes si eres único loco en un país de cuerdos, o el único cuerdo en un país de locos.

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