Tan perpetua te quedas, te tuve inmerecido
Tú altanera y engreída,
Me has dejado, consuelo de pobre, estuviste conmigo!
Me acostumbraste a tu miel
A la zarza ardiente de tu cuerpo
Milagro que dejas y dice adiós sin razones
Huiste y en tu prisa olvidaste, digno castigo de aromas,
Hilo de ideas, recitación de conjuros, magia de encantamientos
Por creer poseer tu inocencia, me hiciste mendigo.
Diosa fugaz, arrebatas mi cordura a la sombra de las noches
Silueta de mares revoltosos, resides en la loma de mi hastió
y mi hastió me ahoga, ahora que no estás.
Mi piel te extraña, tu quien sabe dónde diablos
Y yo aquí en mi infierno, padeciendo la escarcha del frio
Lastimero revivo los besos y el sabor de tu piel
Me devuelven en poco la devoción del calor
Más todo muda y de poco en poco te dejo ir.
ROTTER: me a gustado mucho.. me has dejado impresionada en verdad.....
Sin udad me lo llevo. Muchas gracias por regalarnos este texto... que mis pupilas se han delitado...
"Tan perpetua te quedas te tuve inmerecido
Tú altanera y engreída,
Me has dejado, consuelo de pobre, estuviste conmigo"
Rotter, qué apasionado eres. Tus versos levantan misericordia, pasión, locura extrema.
Nunca te dejé.
Y jamás te dejaría. Nadie puede dejarte.
Bellísimo poema, dulce poeta de lunas y noches incandescentes de locura y delirio.