Al sol...
todos los días sin página que romper
desde esta cárcel...
el sofá de mi salón.
Eran días aquellos donde
bordaba mi corazón
Con hilos de sentimientos
tan puros
Celos tengo del pasado,
de su almohada,
del sol que le asombra,
de las palabras
que recorren suave su piel,
de la ropa
que esconde su secreto...
Me ahoga recordar como,
agotaba mis gemidos,
en noches que no
acababan nunca
Impregnaba en mi badana,
sus caricias,
con sus besos
que con su roce las sellaba
Cada noche, una estela vuelve
a rociar mi alma como polvo de estrellas.
Hoy ya no duerme en mi cama
Mi ser envuelto en añoranza clama
sangra
El tiempo
La ausencia
Esa que nos desviste y nos deja vulnerable
Me encanta escribir con tintes sepias con vos Pepe
Abrazos de lunas en silencio