Muy bonito, todos somos un poco ángeles y demonios, según cuando.
Besitos y feliz Navidad.
Mateo, cuando saco a cantar al diablo que llevo dentro, lo llamo escupir, a veces es necesario. En cambio, cuando alabo algo, digo que Cyrano se apoderó de mí. En cualquier caso, también escribimos para lo demás, y puede, como dices, que hagamos daño sin pretenderlo o lo contrario.
Lo curioso, es que como lectores, según nos coja, buscamos leer algo bueno o malo.
Un abrazo y gracias a ti, que me dejas conocerte
Jejjeje sí Asun, todo depende del momento
Feliz navidad y muchos besos
Papito:
Esa dualidad es la que nos hace tan complejos y tan seres humanos. Hay tantas cosas negras en mí que muchas veces me avergüenzan. En la interacción que tenemos con todo lo que nos rodea podemos descubrirnos y a la vez corregirnos.
Un gusto enorme volverte a leer, padre mío.
Serge-Tu hijo.
Hijito, somos muy parecidos en lo que a la conciencia se refiere. Aunque haya cosas que nos avergüencen, seguimos haciéndolas. Así somos y así nos va jejjeje pero con alegría siempre.
Un gran beso de tu pepe-papi
Reconocer lo bueno y lo no tan bueno que hay en nosotros es para bien o para mal siempre un acto de fe...de fe en uno mismo de darse cuenta de lo maravillosos que somos cuando estamos bien y contagiamos esa alegría que hay en nosotros y cuando no estamos tan bien cuando algo se tuerce...también nos torcemos a uno mismo y sin darnos cuenta a quien más queremos a quien le damos todo lo bueno que hay en nosotros también le damos nuestra versión que menos nos gusta....poema bello y autoreflexivo hacia ti mismo y hacia todo aquello que nos hace no ser tan buenos como nos gustaría....bonita presentación...un saludo cordial y gracias siempre