Nunca pude haber pensado en una situación mas incomoda que en la que me encuentro en este preciso momento. Voy manejando mi auto con la persona a la que le dije abiertamente que sentía algo por ella, lamentablemente ella ya estaba saliendo con alguien y me dijo que no me había visto de esa manera. Como si nada y como le prometí, seguimos de amigos, por que la verdad no quiero perder su amistad por nada del mundo. Que tiene de incomodo esto? que no solo viene ella, viene con su actual pareja y para medio aminorar lo incomodo, viene uno de mis mejores amigos con nosotros. A donde nos dirigimos? Todos vamos camino a la boda de uno de nuestros mejores amigos a otra ciudad. Por que viene el actual novio de la chava que me gusta con nosotros? Por que, pues simplemente por que soy muy buena onda y muy noble como para haberle dicho que no cuando ella me lo pidió.

Una cosa que si me molesto fue que, a pesar de que les estoy dando un aventón, me pidieron que si podía esperar a que salieran ambos de su trabajo. Algo a lo que mi amigo me dijo muy sutilmente:

< “No me chingues cabron! Mándalos mucho a la chingada” >. A pesar de las recomendación de mi amigo, de mala gana accedí, mi amigo no tuvo mas remedio que aceptar, aunque si les hacia saber que estaban mal.

Debido a todo lo anterior salimos muy tarde para un viaje de 5-6 horas, a eso sumándole que por las fechas en las que estamos, el trafico de la ciudad es un desmán. A este ritmo, el viaje pasara a ser uno de 8 horas. Eso no me preocupa, lo que de verdad me preocupa es que pasaremos por un estado que ah sido víctima del narco trafico últimamente. Eh llegado a escuchar que paran a la gente y los revisan, y les hacen cosas, los golpean mientras los graban con sus celulares. Si traen mujeres guapas con ellos, muchas veces se las llevan y no las vuelven a ver. Eso y muchas otras cosas mas, que no se saben en ningún lado, no se publican en periódicos ni nada mucho menos en la TV, solo se puede saber de estas cosas si uno las busca en sitios especializados y blogs de internet.

No voy a mentir, tengo mucho miedo, es tarde, vamos a la mitad del camino y la carretera esta sola. Si hemos visto a uno que otro carro pasar, y como es de esperarse, así como nosotros van manejando a exceso de velocidad. Eso si, la carretera esta libre de cualquier tipo de vigilancia policial o federal. Aun tengo un poco de esperanza, ya que no nos falta mas que una media hora para salir de este estado y entrar a otro. O al menos la tenia…

A pesar de que teníamos buen tiempo en la carretera y de que veníamos platicando de varias cosas para evitar ese sentimiento de incomodidad entre todos nosotros, cuando de pronto todo cambio. No podíamos divisar absolutamente nada en ninguna carril de la carretera, podíamos sentir ese sudor frío entre nosotros, aun así tratamos de mantener la calma. No paso mucho tiempo cuando pudimos ver dos camionetas estacionadas con las luces prendidas y por un lado estaban parados todos las personas que al parecer venían en ellas. No nos hicieron ninguna señalamiento de que nos detuviéramos ni nada o mas bien no me di cuenta, lo que si vi, fue que cargaban armas largas.

Todos nos asustamos, no tenia de otra, tenia que seguir manejando, que mas podía hacer?. A los pocos minutos dichas camionetas se aproximaron a nosotros, una nos rebasó y se quedo justo delante de mi vehículo mientras la otra venia atrás de nosotros. Nos tenia encerrados, maneje así por otros 5-10 minutos, hasta que la camioneta de atrás se puso a mi lado izquierdo al voltear a ver, el copiloto de la misma me hacia una seña de que nos detuviéramos mientras el y la persona del asiento de atrás nos apuntaban con sus armas.

Todos se desesperaron, bajaron sus cabezas, el novio de mi amiga empiezo a tener un ataque de asma o algo así, mi amiga se puso a llorar, mi amigo bajo la cabeza y parecía que estaba rezando, yo solo manejaba, no era muy adepto a eso de las religiones, de hecho me enojaban todas y cada una de ellas. Sentí que ya no había de otra, ahí quedaríamos, nadie mas sabría de nosotros nunca más, solo seriamos parte de la estadística de las muertes en este horrendo país.

Al final nos hicieron seguirlos a un camino fuera de la carretera principal, manejamos por ahí por otros 5 minutos hasta que estábamos lo suficientemente alejados para que no se viera nada desde la carretera, se bajaron con sus armas y rodearon el carro. Uno de ellos vino a mi y empezó a hacerme preguntas:

< “Y ustedes que vergas? De donde vienen? A donde van? A que bando apoyan?” >.

Me encontraba muy asustado, mi cuerpo estaba paralizado, el sudor se empezaba a notar en mi frente. Como pude, articule algunas palabras:

< “Venimos de Guadalajara, vamos a la Ciudad de México a la boda de un amigo. No estamos de ningún lado somos simples civiles. Solo somos nosotros 4, y solo cargamos ropa” >.

El tipo que se había acercado a mi saco entonces una radio y repitió lo que le dije a alguien mas. Después de terminar de hablar con lo que parecía ser su superior en la radio, todos los hombres se alejaron un poco, se juntaron en un circulo y empezaron a hablar. Pude ver como nos señalaban con sus armas, uno de ellos les hacia una seña con unas granadas que traía, se entendía que nos las quería lanzar y después irse todos, pero el tipo de la radio no lo dejo. Al final el tipo de la radio, al parecer su líder, regreso a mi, vio por mi lado de la ventana y se asomo a ver el interior del vehículo y pudo constatar el horror en el que nos encontrábamos. Entonces dijo:

< “Pues ya revisamos y no son ustedes a los que buscamos, pero que creen, tenemos un problema” >. Su mirada cambiaba y su tono de voz sonaba sarcástico: < “Ustedes ya me vieron y no me gusta que me vean y simplemente se vayan” >. Al terminar de decir esto se alejó y comenzó a dar ordenes a los demás.

Dentro del auto todo fue desesperación, sentimos inmediatamente como el mundo se nos fue abajo. Mi amiga comenzó a llorar, mi amigo le comenzó a sacar en cara el que por su culpa y la de su nuevo novio saliésemos tan tarde y que todo esto era completamente su culpa. Mientras yo mantuve la calma, ya nada de eso tenia sentido, no servía de nada lamentarse, estábamos ahí y lo mas probable es que ahí quedáramos.

Evalúe posibles escenarios, prender el carro e intentar arrancar era lo mas obvio, pero era seguro que nos mataran al instante, encenderlo e intentar atropellarlos, pero y si quedaba uno?, no teníamos la verdad muchas opciones. Me calme, respire y mire a mis amigos: mi amigo ahora estaba llorando y con la cabeza abajo metida entre sus piernas, el novio de mi amiga parecía que se había desmayado por el ataque mientras mi amiga lo intentaba despertar moviéndolo todo sin efecto alguno. Entonces voltea y me ve, nuestras miradas se cruzaron y nos quedamos así un momento. Sin pensarlo mucho, me desabroche el cinturón, apague el carro, deje las llaves puestas y… abrí la puerta, finalmente me había decidido por uno de esos escenarios que estaba evaluando. Al momento de hacer esto todos voltearon, unos empezaron a correr hacia mi y otros se quedaron protegiendo al de la radio.

< “Que carajos crees que haces? Deténganlo” > Era lo que se escuchaba. El tipo de las granadas llego primero a mi y me dio un golpe en el estomago con el que me tumbo al suelo donde comencé a revolcarme del dolor y comencé a toser. Otros dos llegaron y me apuntaron con sus armas mientras ahora me remataba en el suelo. Podía escuchar como mi amiga gritaba que me dejaran, y como mi amigo la intentaba calmar. En el momento que dejo de patearme balbucee unas palabras:

< “Por… favor…. ir ……. …Por Favor…… Deja…. ir” >. Uno de ellos se encuclillo, me jalo la cabeza usando mi cabello y me grito: < “Que carajos dices maricon??” >. Como pude, agarre las fuerzas que me quedaban y logre decir una frase completa: < “Por favor déjenlos ir” >.

< “Y por que deberíamos de hacerte caso?” > -replico. < “Quien carajos te crees?” >. Su líder los llamo, se reunieron de nuevo, aún escuchaba gritar a mi amiga. Ya estábamos muertos de todas formas, así que como pude me levante y levante mis manos también mientras caminaba hacia ellos. Estaban a punto de venir hacia a mi de nuevo, pero su líder los detuvo y les dijo que se esperaran. Camino a mi con toda calma y me dijo:

< “Veo que tienes agallas, que es lo que alguien muerto como tu podría querer?” >. Había podido recuperar un poco de mi aliento, ya no tosía y podía hablar un poco mejor: < “Por favor, déjalos ir, te lo suplico……. yo….. yo haré todo lo que ustedes quieran. Por favor solo déjalos ir. Nunca mas los veras de nuevo, te lo aseguro” >.

Se me quedo viendo un momento, nuestras miradas se cruzaron, mis ojos estaban llenos de lagrimas, yo intentaba limpiármelos pero seguían y seguían saliendo lagrimas. De la nada me tomo de la cara y me volteo a un lado y luego al otro. < “Debo admitirlo, tienes muchos huevos para pedirnos esto. Estas seguro muchacho? No hay vuelta atrás” >, yo solo asentí con la cabeza y espere por lo peor. < “BIEN!, déjenlos ir, el se quedará con nosotros. Oye tu ven y ayuda a este cabron” >. Lo había logrado, mi ultima opción había funcionado, de esta manera no moriríamos todos, mientras comenzaban a recoger sus cosas le pedí un ultimo deseo: < “D…d…..d dame un momento por favor, solo me despediré” > le dije, suplicando solo que me permitiera hacerlo. < “Dejen a la señorita que se despida y preparen todo” >.

Inmediatamente me voltee, camine muy lento hacía mi auto, mi amigo estaba jalando a mi amiga para que no saliera. Abrí la puerta y le dije: “Vente de este lado, ahí están las llaves, tengan mi cartera, mi celular y las llaves de mi casa. 0117 es la contraseña de mi celular, busquen a Rebeca en mi celular, ella es mi madre, díganle lo que paso y donde”. Cuando los vi, estaban atónitos, no creían que de verdad estuviera haciendo esto: “ESCUCHARON LO QUE LES DIJE!” les grite, no había tiempo de titubear, no sabía si los sicarios en verdad iban a respetar nuestro acuerdo. < “No ….no n…… no… no hagas esto” > dijo mi amiga con una voz muy baja y lagrimas en sus ojos < “por favor, no” >. Mi amigo no se lo creía, seguía en el limbo, así que con lo ultimo de mis fuerzas lo jale al asiento del chofer, lo golpee en la cara y le dije: < “SALGAN DE AQUI, VIVAN, SIGAN ADELANTE Y NO MIREN ATRAS, ENTIENDES??!” > el estaba petrificado, pero finalmente acepto asintiendo con la cabeza y finalmente se acomodo en mi lugar.

Estaba por darme la vuelta y regresar a donde estaban los sicarios, cuando escucho una puerta abrirse, era la de mi amiga, se bajo a alcanzarme, me abrazo y me pidió que no lo hiciera. Su novio finalmente había reaccionado y volvió en si, no entendía lo que estaba pasando, así que le dije: . El no entendía para nada el contexto de toda la situación, pero asintió de todas formas.

< “Niña, por favor sigue adelante, no se que sea de mi. Siempre fuiste y siempre serás la mejor. Eres lo mas importante para mi. Ahora no lo entiendes, pero quizás adelante puedas y me perdones.” >. No me soltaba, se aferro a mi con todas sus fuerzas y no me dejaba ir. Le dije a su novio que se acercara y la jalara. A mi amigo le dije, que en cuanto ella se subiera arrancara y se fueran. Al final le dije las palabras que no había podido decirle antes: < “Te amo! siempre ah sido así, desde que te conocí” >. Justo en ese momento me soltó y se me quedo viendo, mientras le hacia una seña a su novio para que viniera por ella y la metiera al carro. Cuando la empiezo a jalar se resistió, así que también ayude y la pudieron meter. Mi amigo puso los seguros, me miró por un momento y arrancaron.

Me quede parado, no sabia que esperar de todo esto, solo deseaba que estos sujetos cumplieran su promesa, ya no podía llorar parecía que me había acabado las lagrimas en todo esto. Vi por unos segundos como se alejaban a toda velocidad, mientras el de las granadas vino a mi y me llevo con el resto. Me subieron a una camioneta pegado a una ventana, solo me quede ahí recargado. Escuchaba que hablaban entre ellos, pero ya no podía entender nada. Estaba agotado sin energías para nada, no podía ni mantener los ojos abiertos así que solo los cerré. Y eso fue lo ultimo que recuerdo…

Seguir AutorRecomendar Texto Agregar a Favoritos