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Sueño de Amor (part 6)

Al día siguiente corrí apresuradamente a la casa de KYOKO, ella aun no estaba lista para salir, tuve que esperarla un buen tiempo afuera, cuando ella salió de su casa, lista para irnos a estudiar, me lance hacia ella, y le di un fuerte abrazo de alegría, ella me correspondió con un abrazo un poco inseguro, no sabía lo que estaba pasando, de inmediato le comente todo lo que la noche anterior había sucedido, ella con una sonrisa un poco forzada me dijo:

KYOKO:
¡Bien por ti! Pero ¿Cómo está eso de que estas trabajando? No me lo habías comentado…



JOTTA:
Es cierto, es que fue muy deprisa todo, una noche me decidí después de ver un volante que había encontrado, y pues desde ese momento estoy trabajando ahí, llevo únicamente una noche.

KYOKO:
Son tantas cosas entonces las que tenemos que celebrar, tu trabajo, tu éxito con las chicas…

JOTTA:
¿Con las chicas?

KYOKO:
Bueno con la chica… :D

En esa ocasión nos fuimos caminando hacia la prepa, comentábamos todo lo sucedido, hacíamos muchos chistes referentes a los accidentes ocurridos, era una broma tras otra, risas, carcajadas, sonrisas que se perdían en el tiempo. El tiempo pasó muy deprisa y como si nada había llegado la hora de poder prepararme para el trabajo, entre nervios, emociones, sonrisas desvariadas, y un sentimiento de nostalgia por todo lo sucedido marche a la segunda noche de mi trabajo.
Mis ojos no paraban de ver hacia la calle, esperando la llegada nuevamente de ese grupo de chicas el cual traería consigo a esa bella mujer, a esa hermosa flor, a ese hermoso lirio que fue rescatado para ser exhibido ante los ojos de todo observador detallista. Pasaba el tiempo, pasaban las horas, los minutos, los segundos, pero su figura no fue vista, su presencia no se sintió, su mirada no volvió a verse. Pasaron muchos días y noches, en cada una de ellas siempre había un anhelo, había una desesperación, había un sentimiento de espera por volver a ver a esa hermosa mujer, mi mente no podía dejar de pensar, estaba llenando gran parte de mi existencia, estaba llenando los espacios que correspondían a tareas, estaba absorbiendo por completo mi existencia diaria, no entendía por qué, antes podía controlar mi espacio y mi tiempo diario, ahora estaba descontrolado, había algo que me aturdía, había algo que no dejaba de sonar en mi cabeza > esas palabras cruzaban mi pensamiento una y otra vez, la tonalidad de su voz se había convertido en mi cantico matutino, todo a mi alrededor me hablaba de ella, todo, los pájaros, las nubes que transitaban libres en el cielo, el sol que con su intensidad me hacia vivir todos los días al límite, las luces de los semáforos que me indicaban la precaución, todo me hablaba de ella, todo….
Todo era hermoso al pensar en ella, todo se convertía en una obra teatral, en cada paso que daba mi mente formulaba un nuevo pensamiento, en cada noche que llegaba mi mente formulaba un hermoso sueño, lo vivía, lo sentía, lo podía recrear en mi diario vivir, era hermoso, su imagen, su sonrisa, todo eso hacía que mi mundo pareciera una obra de arte, pero no cualquiera, sino una obra majestuosa, divina, creada por las mismas manos de Dios.
Pasaron los días…uno tras otro, todos pasaron de prisa, todos pasaron muy rápido, en cada uno de ellos viví, en cada uno ellos la extrañé, en cada uno de ellos me divertí, en cada uno de ellos me sumergí en el valle de la soledad porque no la tenía.
KYOKO casi todos los días me invitaba a dar una vuelta con ella, yo no le correspondía, no me sentía de humor para andar divirtiéndome, ella siempre me decía que había perdido el sentido de disfrutar los días, quizá tenía razón, estaba entrando en un lapso muy duro, la ilusión había crecido mucho hacia aquella chica, ella había absorbido todo lo divertido, había vaciado con su ausencia todo aquel espíritu de alegría. Lamentaba mucho no corresponder a mi amiga KYOKO que sin cesar intentaba levantarme de ese estado tan pésimo en el que estaba pasando, ella siempre sonreía y me decía: “Es tiempo de que te levantes, es tiempo que nuevamente tomes tu vida, deja que el tiempo haga su trabajo, tu nada mas ten paciencia” eran palabras muy sabias, no esperaba menos de mi amiga, pero realmente no había manera de que yo solo hiciera eso, mi espíritu me lo impedía, mi propio espíritu se revelaba, que intenso ese momento, que eterno se sentía ese estado, luchaba contra no perder la cabeza en la preparatoria, luchaba contra no perder la cabeza en el trabajo que tanto había querido tener (No era que soñara ser camarero, me refiero a que lo necesitaba), luchaba contra muchas cosas, mi mente ya no podía con más.
Una noche mientras me preparaba para salir de mi trabajo, recibí una llamada:


JOTTA:
Bueno…

TELEFONO:
Aló, disculpa, buena noche…

JOTTA:
Buena noche….

TELEFONO:
Emm… ¿Eres JOTTA?
JOTTA:
Si claro, soy yo, ¿Quién habla?

TELEFONO:
Soy Catrhina, mucho gusto JOTTA, el motivo de mi llamada es para poder pedirte un favor, estuve preguntándole a mis amigos si conocían a alguien que pudiera ayudarme en el área de las matemáticas, tengo un examen final dentro de dos días y realmente necesito reforzarme en el área, una amiga me recomendó que te llamara, y me dijo que eras bastante hábil en esta área y me gustaría que me ayudaras…

JOTTA:
Para mí sería un placer, nada más que hay un inconveniente…

CATRHINA (teléfono):
¿Cuál es?

JOTTA:
Las únicas horas que tengo libre son las de la tarde, en ese horario podría ayudarte, pero no sé que tanto puedes tú en ese horario…

CATRHINA (teléfono):
Para mí estaría bien, aunque si necesitaría más que una tarde para poder estar preparada para mi examen, por el tiempo no te preocupes, yo te lo puedo pagar muy bien, realmente no pido que me hagas el favor de gratis, pagaría las horas que tu inviertas en reforzarme…

JOTTA:
No te molestes, realmente no es por el dinero, son tantas ocupaciones que se me hace muy difícil poder atenderte más tiempo, déjame ver qué puedo hacer hoy para tener el tiempo libre mañana, ¿Puedes llamarme dentro de unos 15 minutos?

CATHRINA (teléfono):
Claro, no hay ningún problema, yo te llamo entonces…


Y así fue como en esa noche me comprometí a ayudar a esa chica que se encontraba en apuros, se notaba en su voz que si necesitaba ayuda, ya tenía un par de meses en el trabajo nocturno y precisamente me encontraba a punto de salir de él, me acerque con mi jefe inmediato y le explique la situación, sin dudarlo me dijo que tomara la noche libre del día siguiente, que no era problema, había demostrado ser un buen empleado y que no era inconveniente darme ese permiso; solo esperaba la llamada de nuevo para confirmar la cita de apoyo, y así fue, exactamente a los 15 minutos transcurridos me llamó:

JOTTA:
¿Eres tu Catrhina?

CATRHINA (teléfono):
Si, ¿Tienes buenas noticias?

JOTTA:
Claro, las mejores para ti, tengo libre el día de mañana…

CATRHINA (teléfono):
Me parece perfecto, te lo agradezco, ¿en que sitio nos vemos?

JOTTA:
Conozco una cafetería cerca del parque central, se llama “PASA BIEN”
¿La conoces?

CATRHINA:
Claro, entonces nos vemos ahí, ¿Está bien a las 08:00Am?

JOTTA:
Perfecto, no hay ningún problema, estaré ahí a las 08 entonces…

Por fin iba a tener un momento de motivación, después de días tan amargos iba a tener un momento que me produjera satisfacción, a mi me gustaba ayudar a las personas cuando me lo pedían, si se trataba del estudio o de lo que fuera, una vez estuviera al alcance de mis conocimientos y de mis manos lo hacía.
Llegue a mi casa con una sensación de alegría, no conocía a CATRHINA pero sabía que enseñar me iba hacer sentir bien, esa noche me acosté temprano (Digo temprano a comparación de otras noches).
Al día siguiente sonó la alarma a las 06:00Am, me levante con un buen ánimo, tenía que inyectarme emoción ya que si iba a ser de apoyo para alguien debía de tener un buen espíritu (Explicar sin un buen espíritu es una perdida tiempo, todo te parece aburrido, y lo que comprendes lo vez como obstáculo para tu descanso), listo a las 07:30 partí hacia la cafetería, elegí ese lugar porque no solo es una cafetería sino que, es como un semi-parque en donde uno puede también tener un momento de recreación o si así lo prefiere tener un momento a solas con uno mismo, había sido de mucha ayuda ese lugar en estos últimos días, así que no vacile en decirle a CATRHINA que nos reuniéramos ahí.
Llegue y ella aun no había llegado, faltaban como 10 minutos para las 08:00Am así que supuse que había llegado muy temprano; pasaron los diez minutos y cinco más y ella no aparecía, de momento pensé que quizá era una de esas bromas de los compañeros nada más para hacerme perder el tiempo, pero cuando pasaron otros cinco minutos vi llegar a la mujer que había hecho sufrir mi corazón, mi espíritu, mi alma entera por tener la oportunidad de verla otra vez, ella ingresa al lugar, mi vista se clava directamente en ella, en su figura, en sus ojos, en su cabello, todo era perfecto, seguía siendo perfecto, había pasado mucho desde la última vez que la vi, había pasado mucho desde la última palabra que pronunció, ella seguía igual de linda, que digo igual, había aumentado su belleza, incrementado como las olas se incrementan intentando besar al sol que se oculta en sus espaldas. Ella se acerco a una de las personas que atendía el lugar y converso con ella, de momento la que atendía el lugar me señaló e hizo un movimiento afirmativo con la cabeza, yo me dije: “¿Que estará pasando? ¿Será a mi quien busca?” y lentamente se acerco hacia donde yo estaba, mi corazón estaba súper acelerado, mis ojos no podían parpadear, porque estaban enfocados en ella, no querían perderse ni un solo momento, querían grabarse literalmente la imagen de esa hermosa mujer, llegó y me dijo:
Singeringen20 de abril de 2012

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