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Peón

Sale el peón de su cuarto en busca de una vida mejor ahí fuera. Después de un par de años sabáticos ha decidido volver a la carga que denomina vida. Pero ahora sabe algo que antes ni podía olerse. Nada es real. Espera mientras se fuma un cigarrillo en la parada del autobús. El último hasta que la ley entre en vigor el día de mañana. El vehículo le recoge puntual. Ojea como se desliza el paisaje por la ventanilla. Nada es real. Todo el mundo interpreta un papel porque es más fácil eso que enfrentarse a la verdad. Y la verdad es que ni sabemos lo que somos, ni lo sabremos en vida. Pero no deja que eso le afecte. Pocas cosas le afectan a día de hoy. Nada es real. Todo deja de cobrar significado cuando tus ojos alcanzan a experimentar el conjunto de las cosas pero ¿como logró poder tener esa visión de las cosas? Demasiadas horas sumergido en la nada. Demasiadas horas muertas sentado en el sofá del comedor esperando a que sucediese algo. Sin resultado. Nada es real. El significado es tan solo una palabra. Incluso la palabra "palabra" es tan solo eso. Sonidos a los que queremos dotar de significado para evitar la soledad que impera. Nada es real. Nada es real. Nada es real. Un ciclista estúpido se cruza en medio del recorrido del autobús, provoca que el conductor haga un movimiento brusco de volante y ¡zas! de pronto, todos muertos. Bueno, o eso es lo que le pasa a él por la cabeza. El resto del viaje hasta llegar a la fábrica sucede con una poco destacable normalidad. Como cada día. Como todos y cada uno de sus días. Es así. Atrapado o, por lo menos, voluntariamente atrapado. Es más fácil resignarse.
Transhumante02 de diciembre de 2010

6 Comentarios

  • Norah


    Es así. Atrapado o, por lo menos, voluntariamente atrapado. Es más fácil resignarse, como siempre excelente como instalas el tema de la seriación de los hombres, de la seriación de lo humano, un acierto el titulo, la pregunta que al menos estamos obligados a hacernos es al menos nombrar los amos.Saludos.. perdón, obligarnos a responder.
    .

    02/12/10 04:12

  • Norah

    Ah, espero tu critica, el que sea apocalíptica batalla con mi principismo.

    02/12/10 04:12

  • Transhumante

    No te critico, eres bella. La sociedad me lapìdaría de hacerlo. Por cierto, te asciendo a reseñadora multi-angular experimentada ¿Sí?

    02/12/10 09:12

  • Norah

    Perdón...gracias por el ascenso, pero no entiendo...seriá algo asi como el panóptico dde transhumante ? haha.

    02/12/10 10:12

  • Indigo

    Me parece que expresas facetas del pasar la vida entre realidades que se ocultan, ¿es tú escrito alegórico a lo que nos circunda y ocurre? y que bien puede pasar como real cuando no se sabe si es cierto que lo es. Eso me transmites, habría que ver que deduce ese peón de lo que siente, y si por comodidad se resigna a aceptar que todo es falso antes de poner a trabajar las neuronas.
    Tus textos no son digeribles fácilmente, ¿me respondes a mis apreciaciones?
    Saludos transhumeantes después de leerte.

    03/12/10 01:12

  • Transhumante

    Índigo/ Mi texto sobre peón retrata la frágil línea que separa la capacidad de abstracción o como llaman algunos, autohipnosis indiviudal, de cada ser humano fuera de la situación que le pertoca en esencia de su antagónico natural, que es la realidad. Esto es lo que ocurre cuando nuestra noción de lo que experimentamos como "la vida" se vá al traste y, la verdad que subyace tras el sentido que, por algún motivo que se me escapa, buscamos darle a nuestras existencias mundanas, se revela como algo que ni buscamos ni deseamos.

    La lucha entre aceptar la realidad o ficcionarla por miedo.

    ¡Saludos!

    03/12/10 11:12

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