Sólo sé que te echo de menos. Que el vacío se adueña de nuestro hogar y que se cuela por todos los rincones susurrando que no estás.
El frío es más intenso en tu ausencia y se convierte en hielo, que cruje por mi interior y que estalla las venas que llegan a mi corazón y que revientan de dolor porque no estás.
Recorro la habitación con la mirada y te recuerdo con los ojos cerrados.
Te has ido y cuesta tanto estar sóla, que me duele entrar en cada habitación inundada por tu ausencia.
Ven pronto mi amor, que no sé estar sin ti.