Todavía recuerdo aquel día,
donde en aquel cajón oscuro
tus ojos ya no miraban,
tu piel ya no sentía.
No entendía, por qué a vos,
ni por qué tan deprisa,
la muerte se llevo tu alma
y tu ausencia mi sonrisa.
Todavía recuerdo aquel día,
donde en aquel cajón oscuro
Tus oídos ya no escuchaban
Tu piel pálida y fría.
Qué misterio la muerte,
dónde estarás a cada hora
No sé si el cielo existe,
pero vos sos mi ángel ahora.
Este duelo no concluye,
mi corazón se hace trizas,
Tu recuerdo me da fuerzas
y mi amor no se termina.
- Para mi abuela, cuando tenía 16 años.
♦ Nanny
"Verba volant, scripta manent"
