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Mi Canción Desesperada

Poquito a poco las heridas que tengo sanarán, y amaré de nuevo, y volveré a ilusionarme, y el cielo se abrirá otra vez y alguien me esperará al otro lado, sonriendo con la mano tendida para agarrarse a la mía bien fuerte, y no soltarnos nunca, y entonces sabré que ya este dolor no puede alcanzarme más. Ahora las heridas sangran todavía, y no amo, apenas si puedo olvidar, y no tengo ilusión porque mi ilusión fuiste tú, y no hay cielo, hay penumbra y nadie me espera al otro lado, a veces está tu sonrisa pero ya no hay ninguna mano tendida para agarrarme y cuando quiero cogerla se desvanece y este dolor viene y me golpea, y unas lágrimas saladas se me desprenden del alma.

Pongo azucarillos de sal en el café para que se endulce, pero se agría, y así me pasa con tu recuerdo, lo tengo para que me haga fuerte, pero me debilita. Y quiero sentarme enfrente de ti y mirarte a los ojos y saber que aún me amas, pero no puedo. Y quiero que me seques las lágrimas y que me abraces para que no haya más dolor, pero no puedes. Y me queda colgarme al otro lado del teléfono pensando si marcar o no tu número para escuchar tu voz lejana respondiendo con monosílabos que se me clavan como cuchillos por todo el cuerpo, y no quiero hacerlo y lo hago. Tu voz me suena extraña, arisca y terrible, y aún así ansío oirla, y me hace daño y deseo escucharla, y me hace llorar, y aún así necesito que resuene en mi cabeza durante la noche.

Aunque tu no lo pienses, te amé con todo el corazón, con toda el alma, con todo el cuerpo y la mente, y desgasté horas de reloj llorándote, y fui a los sitios a los que íbamos por si estabas, y caminé lo que antes no caminé para ver si te encontraba, y esperé, y sufrí y tú siempre pensaste que nunca te quise lo suficiente...y la verdad es que te quise más de lo que jamás pude demostrar, más de lo que puedo escribir, te amé tanto que me va a doler en la misma proporción, y me da miedo porque esa proporción la preveo muy larga. No quiero rimarte esto, ni quiero que quede bonito, quiero que quede sincero porque es la última declaración de amor que te hago, la última carta que te escribo, esta es mi canción desesperada, ya te escribí en mi mente todos los poemas de amor y ahora quiero dejar por escrito lo que ojalá algún día leas. Te amé con todo mi ser y me amaste, mi razón también te amó y aprendió de ti, y por eso te dejó libre, porque te amé te di la libertad, aunque tu no lo entiendas...
Zucette22 de noviembre de 2009

1 Comentarios

  • Sorry

    simplemente....increible!

    23/11/09 09:11

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