Neogrekosay2012
De algún modo compartimos las sensaciones expresadas en tu texto. Dentro de nosotros, una llama de eternidad nos alimenta, pero sabes...y sabes muy bien, que ese reloj del presente nos señala los puntos culminantes, las horas en las que el caudal arrastra las esperanzas. Sobrevivimos de un modo u otro, quizá porque siendo conscientes de cuanto somos...aprendemos a humanizar, incluso nuestros sueños. Siempre existe un lugar donde encontrar refugio. Un gran abrazo.
17/11/12 08:11