El Fruto Prohibido (4)
09 de diciembre de 2008
por danae
-Ja ja j aja
pero qué tonta eres
jajajaja - se reía el bruto, con el rostro congestionado , lo que confería a sus rasgos aún infantiles, y sin embargo llenos de malicia, un aspecto todavía más repulsivo para la niña.
-¿Pero de qué te ríes? preguntó ella, mientras se pasaba la lengua por la boca, intentando sacarle sabor a chuche a lo que se acababa de tragar.
-Que se acabó , jajaja
Vas a morirrrrr
. le contestó el chico, dándole a su voz un tono amenazante. Esa fruta es venenosa, y te vas a morir, jajajaja
.. Y sin más, salió corriendo dejando a la cría con los ojos desorbitados de horror e impotencia ante tal engaño y revelación.
La pobre niña sólo sentía cómo los pies la llevaban a toda prisa a su casa, huyendo y llorando a la vez, con una sensación de terror que nunca antes había experimentado. No quería pensar, sólo llegar a su casa, tenía que llegar a su casa
Se coló por el ventanal que había dejado abierto; mecánicamente, como había planeado, volvió a cerrarla y a dar la doble vuelta a la llave de la puerta de entrada, y una vez en su cuarto, se arrojó sobre su cama deshecha en amargo llanto, ahogando sus sollozos con la almohada. ¿Cómo había podido confiar en ese bruto? Ella ya lo conocía, sabía que era cruel. Pero pudo más su curiosidad por probar el fruto prohibido. Y encima sabía muy mal
y era veneno
y le dijo que se iba a morir. Lo único que en ese momento tenía claro es que nadie tendría que enterarse de su travesura."No puedo decir nada a mamá ni a papá, no puedo contarles lo que he hecho esta noche, si se lo digo, me castigarán y pensarán que soy mala y ya no me querrán nunca más
" Su cabecita empezó a darle vueltas a lo que ella entendía que era la muerte, cuando nadie te mataba como en las pelis de indios sino que morías porque sí. Ella había oído decir que morir así es descansar, como cuando la abuelita estaba tan malita, y cuando murió se quedó descansando, en paz
eso decían
y que algún día todos la volverían a ver. También recordaba que una vez, mientras andaba por el barrio con otros críos, se asomaron por la ventana trasera de una casa donde velaban a un muerto. Se le veía tan tranquilo descansando en su cama
Eso
lo que pasaba es que se acostaban
dormían
y ya no se despertaban en mucho tiempo
mucho, mucho tiempo
una eternidad de tiempo que nunca acaba, cosa que ella no entendía, porque alguna vez tenía que acabar la eternidad, ¿no? " Bien, pues ya está
me meto en la cama y espero a dormirme
y entonces, cuando me duerma, me muero
y como estaré muerta, mis papás llorarán y no me regañarán
y cuando pase mucho tiempo, la eternidad, me despertaré
y mis papás se alegrarán mucho de que me haya despertado
y me querrán todavía más
todo menos decirles nada de lo de esta noche
".
Decidida a llevar a cabo su plan, y puesto que ya sabía que iba a morir, se puso un pijamita que le gustaba mucho, de color azul celeste, con dos margaritas entrelazadas, y se tendió boca arriba como había visto al vecino difunto, con las manitas dobladas sobre su estómago, aunque con las lágrimas resbalándole por las mejillas
Y cerró los ojos pensando con fuerza en que si estaba dormida por mucho tiempo, o sea, muerta, pues que no se iba a enterar de nada. Y que cuando despertase, allí estarían sus papás, tan contentos
.
Sigue leyendo a Danae arrow_downward
Deseo2462 lecturas, 20 comentarios