Uno no sabe que esta enamorado. Hasta que esta enamorado
Yo y mi maldito defecto de ponerle caducidad a todo.
La piel es de quien la eriza. Y a quién no le guste, o no sepa, que mire para otro lado.
Una estupenda declaración de guerra, prepotencia, poder, rebeldía, soberbia que desestructura las pautas de la libertad.
Tú piel es mía si consigo erizarla, así de simple. Y así de difícil.
Que la rebeldía siempre nos bese en la boca. Y que tu cuello pase por mis manos al menos una vez en semana. No me gustaría perder una posesión tan preciada, y a mis colmillos les hacen falta afilarlos.
No deberíamos saltarnos ni aquello que no nos gusta.
Contigo soy capaz de comerme lo verde de los platos si me dejas revelarme contra el mundo.
Pero cuando mi fecha límite parpadee cógeme de las manos, agárrame del cuello, bésame en la boca.
No dejes que cuente los días que nos faltan para entrar en caducidad.
No me dejes ni que respire, abrázame fuerte y erízame la piel.
Porque quiero ser tuyo, de la misma manera que tu eres mía.
En fin.
Y todo esto para decirte:
Que quiero hacerte el amor.
Memorias De Un Joven Escritor.
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