Y ¿cómo te olvido?...
Se cierran los labios, pero quien habla es el corazón.
Una mirada grita tu nombre.
Un suspiro aquieta la desesperación.
Deshojar margaritas no me dará un acierto.
Mucho menos una razón.
Ya la tarde anuncia una noche sola y calma.
Grito silente con eco de desolación
Y ¿cómo te olvido?...
Si aún no te conozco
Eugenio!!... tu poema me recuerda a una chica que conocí en la academia de música, no se por qué... pero los dos últimos versos, me recuerdan a como me siento ahora... sin poder olvidarla, porque ni siquiera la conozco bien... :/... y ademas tengo que esperar once días para volverla a ver, luego de estas vacaciones de semana santa... Muy buen poema y con tu permiso me lo llevare a mis favoritos! Abrazos!!