De todo cuanto fuí ya poco queda;
recuerdos que asolaron tempestades,
regiones donde reinan soledades,
ideas que son solo polvareda.
En torno a mi la duda se me enreda
brotando de su flor adversidades;
en mi interior no quedan mas verdades
que absurda realidad que en mi se hospeda.
De todo cuanto fui queda un desierto,
la seca sangre de un pasado muerto;
olvido se refleja en mi mirada
tengo el alma enterrado entre mis ruinas
y el corazón vestido con espinas.
¿Como puedo vivir si no fui nada?