Olvidada al fondo de un cajón.
Me siento como uno de esos brillantes objetos que compramos porque han llamado nuestra atención y que luego al observarlo en casa con detenimiento nos damos cuenta que carecen de valor. Es una sensación extraña, sentir que no soy tan buena como dicen que parezco, que no soy tan perfecta y digna de admiración como muchos se empeñan en hacerme creer. Resulta difícil aceptarlo, darte cuenta de que solo eres una mas de esas personas que luchan por sobrevivir en esto que consideramos vida. Aceptar que no soy especial, sino simple y normal, es un duro desengaño pero bueno, aunque me sienta abandonada sola y arrinconada al fondo de ese oscuro cajón. En el fondo de mi ser, para mi misma se que soy diferente, que soy especial, porque todos tenemos algo en nuestro interior que nos diferencia del resto que nos hace destacar, salir de ese rincón, de esa oscuridad y plantarle cara a ese mundo tan frío en el que nos ha tocado vivir.
Todos somos especiales, para nosotros mismos, y a veces, para mucha m?s gente, de la que pensamos, en realidad. La verdad, es que vivimos en un mundo de equ?vocos, donde es f?cil llegar a nuestro propio enga?o. En este mundo que nos ha tocado vivir, somos pocos los seres, capaces de expresar realmente nuestros sentimientos, y eso a t?, te hace ser una de esas personas, muy especial, para el resto de los humanos que te rodean.
Tu escritura te da vida propia y te hace especial.
Un saludo.