No he sido yo, el mundo me ha vencido.
Escrita ya la frase hueca y vana.
Adán llevó a su boca la Manzana
Que no quiso morder. Pero ha mordido.
No he sido yo, el mundo me ha matado.
Sobre una mesa yacen ambas piezas.
La carta ensangrentada y la cabeza
De Werther; que fue sólo un desdichado.
No he sido yo, pero quién me lo asevera.
Acaso al mirar el horizonte
(Sin reglas que cumplir, sin protocolos)
Esperando desde la ribera
divisar La barca de Caronte
Admitamos al fin que estamos solos.
LUCIANO CAVIDO MAYO 1 DE 2010
