Es algo mágico,
Es despertar cada mañana,
Y sentir que un nuevo mundo comienza,
Entre llantos, risas y gestos inocentes
Te despiertas y te acuestas
Porque son tus hijos, esas cajitas de sorpresas,
Que con sus actos no dejan de asombrarte,
Que con sus pequeñeces
Recuperas el asombro, la duda, la picardía,
que sentias tan lejana, y ahora la tienes en tus brazos,
Y te ríes al la par de ellos cuando aparece una mancha de chocolate,
susurras entre tus labios los recuerdos que has dejado,
entre, canciones y cuentos pasan los años,
Vas descubriendo, que ser madre,
Es saber decir te quiero, es saber jugar con fuego,
Es pelear sola contra el viento para solo protegerlos,
Es saber que luego de cada tropiezo, tú actúas como un hospital,
Es reír de su sonrisa, es llorar de su llanto,
Es conocer y dejar conocerse,
Es entender y dejar entenderse
Es volar y aunque duela dejar volar,
Es sentir que la vida es un desafió
Es jugar a la rayuela mientras se hace la cena,
Es cantar una canción en medio intentando dormir,
Es pintar de colores unas hojas mientras hablas de negocios,
Es volver a ser niña y reír como una niña,
A jugar como una niña y a pensar como ellos,
Sin dejar de actuar como madre,
Es juntar el cielo con la tierra en un mismo horizonte,
Son ellos y tú la creadora,
Es permitir la huida pero sin nunca olvidar la llegada
Porque aunque estemos lejos y los universos algún día nos separen
Nunca olvidare quien me dio la vida, vos mi madre
