Tanito
Sisisisisi, que gran verdad la que expones. Conforme vamos cubriendo nuestras necesidades, las personas, influidísimas por la infinita voracidad de la sociedad consumista extrema, nos vamos creando necesidades nuevas. Lo que hace poco nos parecían lujos innecesarios pasan a resultarnos imprescindibles y estresantes si nó disponemos de ellos. Esclavos de nuestras comodidades, curiosa paradoja. Lo has expresado con un relato precioso, felicidades.
¡Besos!
23/03/11 09:03