El Receurdo que Guardó mi
Niña!
Es la triteza de aquel portal
aquel Otoño y su sentido matorral.
Panico a desatar los cruces de cables
el chispazo de no conocerte aún, tranquila,
no nos vamos a quemar pues esto debe funcionar;
yo no insisto y tu me regalas el significada acelerado de civilizado.
Yo soy yo,
con mis recuerdos, mis fiebres, mis fotos,
mis viajes de siempre.
Una niña en Invierno sin muñeca,
la congoja desolada y tus andares precipitados.
¿Qué voy hacer sin mis sombras,
sin su viveza,
sin el poder de resguardas un receurdo sin baúl,
sin llave ni candado.
Es el ceilo en su despistado despertar,
un destrozo inusual de la gravedad
mi bolsillo y su agujero.
Que se caen mis moneditas por el hueco que al romperse aqui dejo mi borracho corazon.
Que si quieres pongo bote para invitarte al estreno de esta soledad.
Que si quieres me desnudo , dejo abiertas las ventanas por resacas que un día llegue a cerrar.
Que si quieres me reinvento para poderte encontrar.
