Paulitinamente,
una reflexión muy oportuna en estos tiempos en los que la opinión ajena cobra un inmenso poder.
La avidez de reconocimiento y de visibilidad no es más que el reflejo de las estrecheces de la personalidad y del criterio.
Un saludo
30/06/20 03:06
Lo rimbombante y grandilocuente, se lo suele llevar la riada, tantas veces como aparece y nunca más se supo. Importante no dejarse llevar por ella y tener esos tesoros, discretos y más o menos escondidos que a la postre son la esencia que al margen de castillos en el aire te hacen ser.
Buena reflexión.
Un saludo cordial.
13/07/20 11:07