jazmin
Recovecos oscuro en la noche estrellada, una voluptuosidad blanca
con luz radiante, maniobra fugaz hace una estrella pasando de este a oeste,
dóciles mis sueños, se adentran en un laberiento donde un violín se mece junto a un
piano que no deja de sonar con clave de sol.
Cuando ya la aurora clareaba, un viento del oeste, fresco, se adentra por la ventana
que en su frío me deja notar esas exquisitez de aromas a jazmines y damas de noches,
que en su afán de envolmerme en su olor me dominan y llevan a recuerdos no tan lejanos
en los que mi olfato los recuerda.
El primer recuerdo resuena y exita mi ser, como agua cristalina, fresca, sin mácula.
A un tiempo pasado que miro con embeleso, contemplación, quiero susurrarle
!VUELVE!.