Sobre sus labios lleva un beso
plegada su falda leve toca sus piernas
deseos lumisos
llueve calle abajo
y se guarda las ganas
Muerde sus labios
y sabe que la quiero mia,
pero me esquiva
y me guardo mis ganas
para ver que resulta
Y resulta que no eres mia
que te tengo y no
que despiertas conmigo una noche
y otras sueño contigo
pero en verdad
es nuestra mania.
Nos encontramos
y nos desencontramos
somos dos amantes
causando alboroto
que la noche esconde
con ojos abiertos
tu y yo divergimos
tu y yo nos probamos
dulce y grande te resbalas y me impregnas
de fuego, de tus ganas
y resulta que siempre ganas.
Qué orgullosa se debe de poner al sentirse que la quieres tuya, que va y que viene coqueteando con su falda y tu deseo.
Te soñará en la noche a oscuras en el silencio oscuro de las sábanas, donde nada ni nadie puedan adivinarla.
Benditos los sueños que nos llevan a lugares ignotos e imposibles.