Acabo de leer el libro del uruguayo Eduardo Galeano, "Las venas abiertas de América Latina" y he quedado muy triste, al confirmar que este mundo y su sistema económico imperante, asumen (masticando y tragando la vergüenza) que los pobres y desvalidos no son más que los efectos colaterales que deben ser "asumidos" para alimentar la codicia de unos pocos.
La escasez de recursos debe ser mantenida, para que todo cueste más...
por ello no se invierte en energía eólica, mareomotriz, solar o geotermal, porque esos recursos energéticos serían prácticamente eternos. Tendríamos energía limpia para siempre, pero si cada uno tuviera un sistema de estos en sus casas para hacerse de energía, no podrían vender combustibles fósiles. Si nadie pudiera vender no existirían esas diferencias abismantes entre transnacionales que concentran ganancias en unas pocas manos y reparten inequidad y hambre para el resto del mundo.
Después de leer "Las venas abiertas de América Latina" realmente he quedado muy triste, tras asomarme a la ventana de esta realidad que nos esclaviza...
las venas abiertas de america latina siguen sangrando sobre todo en Honduras donde el pueblo es sometido por la dictadura de la oligarquia el clero y los militares. Abajo la dictadura! Viva la resistencia popular hondureña!