La noche ha caído ya…
Fría, ausente, con sus garras,
Dando muerte a la muerte misma…
En mi tumba y sepultada
Así me encontré hoy…
Intentando levantarme,
Me ha vuelto a sorprender,
La oscuridad aterradora,
La vida yaciendo a mis pies…
Usando los escombros de escalones,
Fui subiendo…atreviéndome…
Piedras grises, borrascosas
Que me hunden y lastiman,
Yagas vivas en mis manos,
Mis recuerdos por vencer…
Empujando hacia arriba…
Así renaceré…renaceré…
Y cada una de las piedras,
Iré pisando a la vez…
Así llegando a la cima
La misma que me enterró ayer…
Solo que ahora, ahí mismo, a la tumba usare,
Para ver el horizonte, como nunca pude ver…
Me encontrare por encima de ellas,
Allí están, a mi merced…
Entonces veré triunfante,
Aquello que me sepulto una vez…
Regalas hoy una introspección maravillosa, derrotada y sepultada por la vida misma resurges con tu historia que ahora te hace fuerte, te veo de pie sobre tu tumba, que ahora se ve como una gran montaña, gritando que estas viva y que eres dichosa y también me veo a mà observando a una hermosa mujer tomando su fuerza, despojándose de su miedo, afrontando su realidad, valiente y plena.
Hermosa y valiosa poesÃa!
Abrazos muchos,