Tarde gris, noche oscura
dolores conocidos vuelven a surgir. Tempestades que no cesan, tormentas sin calma, noches sin luna
El ciclo se repite emergiendo de él una espiral de dolor, laberintos sin salida en los que me pierdo, y en los que la esperanza se desvanece, donde la debilidad se hace visible, donde nace la locura de un hombre, donde la suerte se vuelve utópica y los sueños de cristal.
Tropiezos, caídas, obstáculos que el cruel destino se encarga de poner en mi camino, juega conmigo, y no hay más remedio que oponerse a él, correr contra el viento y luchar contra el tiempo.
Dulce comienzo y amargo final, todo es conocido, dolores que se clavan como la primera vez, palabras que resuenan a través del pasado, penetrando en el presente y empañando el futuro que queda huérfano de esperanza y se alimenta de incertidumbre
Tarde gris, noche oscura... dolores conocidos vuelven a surgir. Llueve sobre mojado.
Hola Adrielegance. Estupendo relato. La esperanza es lo último que se pierde. Saludos cordiales. Marcial. Seguiremos leyéndonos.