EnejenaciÓn Cerebral
Recogí los sesos del suelo
con la enajenación cerebral en las pupilas de la duda.
Perdí a causa de tu ruleta rusa el vino del lapso
y el ocaso se transformó en una insolencia temeraria.
Ahora me dicen que he recuperado
un cadáver del lago donde anidan monstruos
con cabeza de abdicaciones.
Finjo estar en estado de shock para sobrevivir
y reír a través de argumentaciones
con océano partido en dos
desde el principio de los tiempos
Recogí los sesos del bordillo
gracias al aliento de las intrigantes palabras
que reciben órdenes de unos seres
que aún residen en el altillo de lo inconstante.