Vals.
Un dìa bailaremos ese vals que nos pertenece,
disfrutaremos de esa melodia que nos une
y suena a pesar de la distancia que nos separa,
en un gran salòn, lleno de luces, tomarè
una de tus delicadas manos y te invitarè
a bailar tranquila y amorosamente nuestra pieza,
negarte no servirà, pues tus pies no soportaràn
el quedarse inmòviles, mientras sigues sentada
en tu silla. Y aunque al bailar no entiendas que
el amor que siento por ti todavìa no se ha secado,
me deslizarè al unisono de la mùsica complacido
a tu lado, afortunado de compartir contigo,
aquel baile de salòn que prometimos bailar.
Un dìa bailarè contigo aquel vals,
nuestra melodìa de amor eterno.
