Siempre se ha dicho que no somos lo que creemos que somos, sino lo que los demás ven de nosotros. Si me guardo algo sólo para mí, sin poder compartirlo con nadie acaba por no existir y si por más que piense que soy algo que nadie más ve, no se va a convertir en realidad. En cambio, lo más probable es que si todos me dicen que soy de una determinada manera, acabe creyendo que soy así.
Hoy en las redes no deja de ser igual. Sólo hay una diferencia. Hay que tener cuidado con el dedo y el botón enviar. Antes una respuesta irreflexiva, a lo sumo era conocida en el pueblo o en el barrio de al lado.
28/12/20 01:12
Hola Clopezn, ante todo gracias por tu comentario, opino que entonces es cuando entra en conflicto tu yo autentico con tu yo social, es una buena reflexión saber si es el mismo o son diferentes..., pienso que somos creaciones hechas a base de todos nuestros años de vida ya sea por aprendizaje propio, por imposición social, o por simples modas, en este texto quería plasmar una parte que sin duda existe de impostores virtuales llegando al limite de vivir en una jaula hecha a la medida y gustos de sus followers, y están tan a gusto en ella que no se sienten prisioneros (aunque también pienso que en cierto modo todos somos prisioneros en muchos ámbitos y lo aceptamos, la aceptación o no es la clave), pero a mi modo de ver lo son ya que están condicionados a que si se salen de esa línea de vida que se han trazado dejaran de influenciar y en cierto modo esto lo han convertido en un propósito de vida, pero claro que no es la regla es solo una porción de la psique humana, y lo extraordinario es poder tener un pensamiento critico y hilando con lo ultimo que dices saber localizar las respuestas irreflexivas y discernir que lo son.
Un saludo.
30/12/20 07:12