TusTextos

La Persiana de la Moral

La persiana moral no puede clausurar el deseo.
Por suerte.
Será por eso que ella,
Que no llamaba mucho la atención,
Salvo por un culo enorme y unas tetas pequeñas
De pezones grandes y endurecidos,
Después de tomar unos pases de cocaína,
Con su novio y unos amigos.
Me agarro la pija con la mano en medio de la calle,
Sorpresivamente.
Su novio iba veinte pasos adelante distraído.
Me arrincono contra una pared,
Me bajo la bragueta y empezó a chuparla.
El novio se perdió en la esquina.
Justo paso un patrullero.
El brazo armado de la moral se hizo el distraído.
Y el deseo te da sorpresas.
Ella la tragaba y pasaba su lengua
Con violencia y a un ritmo continuo.
Aquello me excitaba demasiado.
Ella no llamaba mucho la atención
Ya lo dije.
Pero la persiana pesada de la moral
Termino manchada de semen arrancado
A la noche
Por una lengua bendita.

Ateo21 de agosto de 2009

4 Comentarios

  • Fabio

    No me voy a poner a indagar si el hecho es autobiográfico o se trata del famoso yo poético y es pura ficción. Tampoco tengo ganas de sentir envidia y esas cosas... que mi moral no me permite... je! quizás sí el deseo. Pero está bueno el poema, bahh... no es para tanto tampoco. Saludos y te aprecio.

    22/08/09 12:08

  • Mejorana

    Te dejé el comentario en otra parte.
    :)

    22/08/09 12:08

  • Aroint

    Con que comodidad la gente luce la persiana de la moral en las puertas de sus casa, para poder dar rienda suelta a sus deseos tras ella, escudados en las apariencias.

    Tus poemas siempre son un momento de acercarme a una realidad que nunca me acabo de gustar y mirarla con cierta sonrisa, y eso quiere decir que hay magia en tus versos.

    Cuidate Ateo.

    22/08/09 12:08

  • Danae

    La persiana moral no puede clausurar el deseo ...
    Cierto, Ateo.
    Y el brazo pesado de la moral se hace necesariamente el distraído.
    Consecuencia.
    Un abrazo.

    23/08/09 11:08

Más de Ateo

Chat