Perdoname,
por desestimar la casi imperceptible fragancia
del límpido retoño.
Ha sido por su propia fronda,
que el oscuro crepúsculo
no se ha hecho luz ni amanecer.
Se han incrustado los cardos en la principal arteria,
la que sin sangre se enmaraña
en el recuerdo del torrente.
Ha de ser por ello,
por la ausencia del incoherente latido,
que hoy sostengo entre mis manos
la inmaculada exquisitez de la esperanza.
Un pétalo en lugar de mi corazón.
Caro:
"Ha de ser por ello,
por la ausencia del incoherente latido,
que hoy sostengo entre mis manos
la inmaculada exquisitez de la esperanza".
Amiga del alma siempre es una alegría inmensa verte por el foro aunque sea de vez en cuando, te deseo siempre lo mejor, tú eres una gran persona y una gran poetisa.
Te abrazo ave libre con el corazón.
Sergio.